viernes, 14 de febrero de 2014


Trágico Ballet…I


Otra vez aquí… contemplando la luna llena, trayendo memorias de aquel que me despierta lo llamado “Amor”, que según mi madre es equívoco… equívoco para mí sería aceptar y creer sus palabras, dando con ello la espalda a mis sentimientos.

Lo único que acepte de ella, fue éste nombre que poseo lleno de fortaleza y esta esencia de vida con aroma gótico que llevo dentro.

Néstor, así me llamó mi madre y así me llaman todos los que me conocen y han escuchado de mí.

Emancipado de mi familia a causa de mi sentimiento hacía el vocalista del grupo al que llevo tiempo de pertenecer; así es, (un hombre y otro hombre) eso no es extraño para mí… pero tal vez tu piensas distinto.

Déjame que te cuente lo que ocurre en mi mundo.

El grupo al que pertenezco se llama: Trágico Ballet, somos cuatro miembros los cuales:

JIMMY (Baterista): es delgado, moreno claro, tiene su cabello negro y lacio hasta la cintura, te podría decir maravillas de él pero no acabaríamos, lo que si te digo es que lo quiero como a un hermano.

DARK POET (Tecladista): por ser el mayor, es al que recurrimos para cualquier problema ya sea material, moral o sentimental. Su cariño hacía nosotros es vehemente como su personalidad.


SAGA KASTRONOVO (vocal)… quisiera contarte de él pero, con éste desequilibrado amor que me provoca te lo pintaría más allá de la perfección. Solo te relataré del día en que lo conocí. Me acababan de hacer parte del grupo y nos habíamos reunido en el local que pertenecía a Kastronovo donde se vendían artículos góticos. Dark Poet me hablaba maravillas de él así que sentía un tanto de curiosidad por saber quién era, sólo estábamos los tres y entonces lo vi… llegó tropezando con la puerta, sonrió y exclamó una grosería que a todos nos dio gracia.

Si…allí estaba irradiando carisma y luciendo un look que le hacía lucir atractivo…me miró sonriendo y me dijo:

- Hola ¿Tú eres Néstor?

- Sí… ¡Hola!

- ¿Gustas una cerveza, Néstor?

Él de inmediato trató de hacerme sentir en confianza y lo había logrado, me sentía cómodo de haber aceptado ser el nuevo Bajista. Entre los cuatro la noche fue amena, Impulsivamente volteé a verle… no lo hubiese hecho, ya que sentí como enfáticamente Kastronovo se acomodo tranquilo en mi corazón.

Esa noche invitaron a unas chicas, yo ignore ese sentimiento pensando que quizá era cariño espontáneo y me dediqué a tener sexo con una de ellas para festejar mi llegada a la banda.

Conforme fueron pasando los días me sentía inquieto hasta desesperarme por querer verle, era una agonía, pero trataba de explicarme  el ¿Por qué?

Hasta que una noche en unos de mis tantos sueños, lo tenía desnudo, acurrucado entre mis brazos, respirando agitadamente y yo cobijado entre sus piernas buscando darle saciedad a mis deseos. Sentí sus brazos subir por mi pecho lentamente hasta rodearme por el cuello en un agonizante deseo. Posó su mira sobre la mía que estaba un tanto confusa, y entre el rose de los labios mutuos me dijo en voz baja y entrecortada por la agitación:

– ¡¡A…ámame más!!

Paso suave, húmeda y tentadora su lengua por mis trémulos labios y en ellos volvió a depositar la frase:

- ¡¡Ámame más!!

Aun en mi sueño estaba sorprendido de ¿por qué él? Pero eliminé esa interrogante de inmediato ya que sus actos y sus murmullos eran irresistibles, eran provocación a mi egocentrismo para saciar aunque fuese en la inconciencia de un sueño todos mis encarnados deseos por ese cuerpo.

Después de aquella noche, el sólo recordarlo evocaba en mí contracciones de excitación imparables que me llevaron a pensar que esto que sentía avivarse, no sólo en mi carne si no en mi corazón, era Amor… yo me había enamorado de Saga Kastronovo.





Continuará…


CAPITULO X
CAPITULO XII
CAPITULO XIII

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